Dicen que el amor es complicado. Yo les conteste a mi discípulo que nuevamente lo vi triste; que el problema no es el amor sino las personas que piensan e idealizan algo tan semántico tan falto de definición si no sabes ni siquiera que sientes por algo o alguien.
Mi discípulo tenia una novia, así la llamaba él, pero la susodicha no era soltera, aun así, mi discípulo se encariño con ella al grado de que no se recupera de su separación, no asimila que esa mujer jugo con sus sentimientos, que no sintió nada y por lo mismo no lo recuerda puesto que no ha recibido llamada o mensaje alguno.+
Ya lleva varias borracheras e insiste en pasar x su casa, marcar su numero, enviarle mensajes y nada. La ultima ocasión que le marcó, contestó otra persona. Mi discípulo sufre del corazón y su mente no recupera el sentido de identidad que lo identificaba, solo piensa en lo que hizo bien o mal, siente que debió haber hecho otras cosas y acude a mi para preguntarme; yo como hombre adulto, con pareja y con una pequeñita responsabilidad no tengo todas las respuestas. Solo acierto a decirle que los hombres no debemos llorar enfrente de nadie y que este llanto debe ser profundo sin un nota de eco lagrimal, ver directamente a nuestros ojos y decirle a la otra parte de la melancolía que somos lo suficientemente fuerte para poder con eso y mas. Pero no lo convenzo, llora delante mio y gime cual niño al no tener donde dejar caer su tristeza y soledad.
Quisiera poder ser su amigo y acompañarle en su dolor pero no puedo, no tengo la misma sonrisa burlona en mi cara, vaya ni siquiera tengo las mismas fuerzas para combatir a su lado. Simplemente lo escucho pero me siento raro, es decir, no recuerdo yo haber estado en la misma situación. ¿Sufrir? nada de eso, mi frialdad me ha permitido pasar por eso y mas. Nada de lágrimas de mas, solo las justas porque tampoco diré que soy Pedro Navajas, a él lo mataron.
Total que le dije, bato, alivianate, llora mas, mucho mas y deja de sufrir. Ya me harte para la jodida de verte así.
Le grite: Hola y Adiós
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