miércoles, 28 de abril de 2010

HABLANDO CLARO

que difícil para la morriza cuando algo no alcanzan a comprender. En una noche de guardia nocturna escuche a un chavo hablar de su pretendida. Una mujer, dice él, que vale la pena. Cuenta el vato que tiene tiempo tratándola pero le resulta difícil seguirle el paso; hay días que la desconoce y otros simplemente no recuerda que pudo haber dicho.
No pues la tiene difícil el vato entones. Sobretodo cuando la mujer le dice que sí lo acepta pero bajo unas condiciones medio cabronas. El chavo no comprende una situación así y lo pone de manifiesto porque se deprime. A su edad esta cabron aceptar algo de ese tipo. Y bueno, uno de mayor podría ayudar pero es mejor guardar un poco de silencio.
Total, entre un hombre y una mujer lo mejor es dejar las cosas por las buenas. Muy por las buenas, no meter la cuchara. Hay otros canijos que andan viendo nomas la de joder y hay e mujeres que les encanta ser jodidas.
Ya no sabe uno con que se encuentra, le dije al chavo que se pusiera a buscar a alguien mas adecuado. Allá él y su conciencia. A los cabrones como yo, nos la pasamos cabroneando y sin detenernos para ver que pedo.
Total, cada quien tiene su santo.

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