martes, 16 de noviembre de 2010

Me sofoca.

Martes, día sombrío, cansado, mas lento que de costumbre. Miedo, nuevo proyecto de vida que dura mas que la penumbra de un noche de vela y alcohol. No es un pantalón nuevo, ni un perfume que deja su esencia hasta por 20 hrs...
Sofocacion e incertidumbre, ¿habré hecho lo correcto? Por momentos pienso que todo este asunto es una oportunidad de mejorar, ¿que? la mejora solo va en virtud de cosas que no interesan después del sufrimiento.
¿Valdrá la pena? Canto en momentos ultra metafisicos, donde con seguridad ningún ser humano regular podría tolerar ni un segundo, y me veo con una sonrisa enorme y mi pecho se llena de gozo infrahumano, no terrenal y me siento bien, siento que vale la pena todo este esfuerzo, que es el mejor camino que debo tomar y que nada de esto sera para siempre.
Me siento inseguro cada hora que pienso en la seguridad misma, cuando siento que mi alma vaga en pena, en silencio, en agonía por preocuparme; aunque mi sexto sentido me ayude a no caer en la depresión, no siento a veces las manos. Las personas que no tienen sexto sentido, no reconocen esta sensacion. Mis manos parecen que traen guantes y no siento la textura masculina de mis varoniles huellas dactilares. Pasa el rato y poco a poco regresa esa sensacion de rigidez en mis manos y mis huellas facilmente quedarian incrustadas en hierro candente para la posteridad.
Otra sensacion es la de lejanía, súbitamente las cosas se ven fuera de perspectiva, lejos (para los que saben de Dibujo Tecnico Industrial se llama HORIZONTE) y no las puedo enfocar. Esa tipo de visión sola la tenemos aquellos seres inanimados que pasamos la vida sobrepasando a las humanos comunes y corrientitos que ven normal. Después de un rato vuelve mi varonil mirada y todo es normal, tranquilo y pasa como si nada haya estado alterado.
Nada puedo cambiar hasta que no este en esa situación, me dijo un día mi sensei que preparo mi mente para vivir mas allá de lo humanamente posible, que me dio fuerza para trabajar en momentos de sumo cansancio, para pensar bajo presión de 4567099 psi, para imaginar un mundo perfecto despues de un momento imperfecto, para soportar los momentos mas fríos de al menos 15° de temperatura y para levantarme aun después del 12 round habiendo sido noqueado por ni mas ni menos que Manny Pacquiao y seguir en la brecha.
Y después dicen que soy egoísta, insensible, falto de amor y amargado.

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